Lavanda:
Propiedades antibacterianas: Ayuda a reducir las bacterias que causan el mal olor.
Propiedades calmantes: La lavanda tiene un efecto relajante y puede ayudar a reducir el estrés, lo cual es un buen complemento para la piel sensible.
Coco:
Propiedades antibacterianas y antifúngicas: El aceite de coco tiene la capacidad de combatir bacterias y hongos, lo que puede prevenir el mal olor y mantener la piel limpia.
Hidratación: Nutre la piel manteniéndola suave e hidratada, evitando la resequedad que algunos desodorantes comerciales pueden causar.
Propiedades antiinflamatorias: Ayuda a calmar la piel irritada o inflamada.
Sábila (Aloe Vera):
Propiedades calmantes: Ayuda a aliviar la irritación y el enrojecimiento de la piel, lo que la convierte en una excelente opción para pieles sensibles o después de afeitarse.
Hidratación: La sábila es muy eficaz en mantener la piel hidratada sin dejar sensación grasosa.
Propiedades cicatrizantes: Puede ayudar a sanar cualquier pequeño daño en la piel, como cortes o roces.